Los siete puntos mágicos de Chiclana de la Frontera es una ruta que se creó por el ayuntamiento de la ciudad para conmemorar el séptimo centenario de la fundación de la población. Fue Fernando IV quién otorgo en 1303 las tierras de Chiclana al noble Alonso Perez de Guzman para repoblarlas en las cercana e inestable frontera con el reino de Granada. Estos parajes y lugares han sido considerados por su historia, importancia natural o belleza como parte significativas de su territorio, denominándolos como puntos mágicos y así ofrecer atractivos que visitar a los curiosos y turistas de los hoteles de Chiclana.