Esta vibración en 396 Hz estimula las áreas principales que actúan en tu cerebro cuando sientes placer. Deja sonar esta frecuencia de fondo y hará lo suyo. Casi sin darte cuenta, se irán aplacando las zonas del miedo y la culpa, dándole rienda suelta a tu cerebro para interpretar el placer puro. Y no hace falta que el volumen esté fuerte. Alcanza y sobra con que suene de fondo.
Funciona para una o más personas. Si quieres acelerar el proceso, recuéstate o siéntate en un lugar cómodo, cierra los ojos y respira profundamente, inhalando por la nariz y exhalando por la boca. Lentamente, la Frecuencia del Placer hará que tu mente se centre en las sensaciones del cuerpo. Cada parte que estimules enviará un mensaje amplificado al cerebro. Al cabo de unos 20 minutos ingresarás a un nuevo espacio sensorial. ¡Que lo disfrutes!